LA IMPORTANCIA DE LA FORMACIÓN EN EMPRESAS
El 90% empleados piensan que la formación ayuda a mejorar la competitividad de su empresa.
Según un estudio reciente, aun siendo la modalidad “más clásica”, la formación presencial es el tipo de formación que más disfrutan los empleados Europeos (87%). La formación blended, que combina sesiones de formación presencial y digital, aumenta de forma notable (46% vs. 36% en 2015).
Por países, Reino Unido y España vuelven a estar a la cabeza en consumo digital. El 53% de los empleados en el Reino Unido y el 52% en España han sido formados en formato blended. También ocurre con el elearning que ha sido utilizado por un 62% de los ingleses y un 60% de los españoles. Portugal destaca por su consumo presencial del 94% y Francia por la resistencia a las modalidades digitales que en cualquier caso son las de mayor incremento con respecto al 2015. Destaca también la progresión de la formación individualizada, tutorías o coaching que encabeza Alemania con un 54% y en la que España registra un 48% de participación.
Confirmando este patrón de cambio hacia una formación más blended y a distancia, el 88% de los Directores de Recursos Humanos o Formación europeos (un 86% en España) están de acuerdo con que, en su compañía, la formación se está moviendo cada vez hacia la tecnología digital (frente a un 80% en 2015).
La formación digital es bien recibida por los empleados, sin importar el contenido de la misma, con muy altos niveles de satisfacción, aunque este dato contrasta siempre con la preferencia presencial. Como tal, el 92% de los empleados europeos cree que la formación se ajusta a sus necesidades de una forma “eficaz o muy eficaz”, la formación individualizada obtiene un 91% y la presencial un 96%. Los trabajadores españoles están muy satisfechos con los diversos tipos de formación, con un nivel similar de respuesta como el resto de los empleados europeos sondeados.
Por lo que a la formación a distancia se refiere, los empleados españoles sacaron el máximo provecho y vuelven a estar a la cabeza en formatos innovadores como los módulos, videos o aulas virtuales. El uso de la formación blended y digital está aumentando año tras año y los empleados valoran en gran medida este tipo de cursos. Es de destacar que la formación, independientemente del contenido, recibe un muy alto nivel de satisfacción. Como tal, el 94% de los empleados europeos y también de los españoles piensan que el objetivo y el contenido de la formación recibida responden a sus necesidades. El 90% y el 89% piensan que los métodos de aprendizaje son adecuados. El 86% y 84% piensa que los puntos de aprendizaje de la formación ayudarán a sus planes de carrera. Por último, al volver al trabajo, el 77% de los empleados europeos y el 78% de los empleados españoles fueron apoyados activamente por los directivos para poner la formación en práctica.”
Una conclusión alentadora: los empleados Europeos se consideran responsables de su desarrollo de habilidades (53% respondió “sí, absolutamente”). En total, 92% de ellos (incluyendo el 50% que respondió “sí, absolutamente”) cree que la formación aumenta la competitividad de su empresa. Con respecto a esta declaración los empleados portugueses, españoles e italianos tienen los más altos niveles de acuerdo. Independientemente del país en que se trate, los responsables de recursos humanos y formación coinciden con la afirmación.
Profundizando, la formación proporciona un medio para avanzar en una carrera profesional para el 92 % de los empleados europeos (incluido el 59% que respondió “absolutamente”), la búsqueda de un puesto de trabajo (89%) y la permanencia en el empleo (89%). En España los trabajadores valoran especialmente el impacto sobre la carrera 94% y para encontrar trabajo 92%. Más de 8 de cada 10 empleados europeos piensan que están muy bien informados en lo concerniente a la formación.
El éxito de la formación presencial sigue imperando entre los empleados europeos, el 28% de los empleados europeos cree que la formación presencial en el aula es el medio más eficaz para el desarrollo de sus habilidades, por delante de la formación individualizada, por ejemplo (24%).
Como una ejemplo interesante de la responsabilidad otorgada a los empleados europeos, el 63% afirma haber solicitado personalmente y organizado la formación. Las puntuaciones más altas son dignas de mención en los empleados de Reino Unido (76% vs. 49% para los empleados portugueses). El 70% de los españoles formados tomó la iniciativa.
Los empleados europeos también se sienten respaldados por sus directivos:
– El 69% tiene una entrevista previa a la formación para identificar los objetivos.
– El 65% se reúne con sus superiores después de formación para elaborar un plan de acción.
– El 69% recibe ayuda en la puesta en práctica del aprendizaje.
Mirando con más detalle, los directivos en Reino Unido, Alemania y España proporcionan mayor apoyo, mientras que los directivos en Francia y Portugal son los directivos “menos implicados”.
Del mismo modo, el 75% de los empleados europeos piensan que su compañía pone todos los medios para que la formación sea eficaz, el 69% se ajusta a la evolución de los puestos y las organizaciones y el 68% para localizar eficazmente las necesidades formativas de los empleados. Una vez más, los empleados en el Reino Unido y España son los más positivos, mientras que los empleados en Francia son los más críticos (70%, 63% y 65% respectivamente)
Los empleados se sienten responsables y respaldados en lo que respecta a la formación, que es algo que todos los países europeos sondeados tienen en común. En España destaca la valoración de los Responsables de RRHH y formación que se consideran un actor estratégico del desarrollo de las competencias y talento de la empresa (49%). Destacan prioridades como la asesoría y garantizar el ROI, aunque la gestión de la formación tiene todavía un peso elevado (60%) por encima de la vinculación de la formación a la estrategia (58%)
